13/1/24

Presentación

  

Al pueblo de Benajarafe 
         donde descubrí que los tesoros existen



Fotografía de Eugenia Delgado

Cuando en 2006 visité el Archivo de Vélez- Málaga, no me movía ninguna razón relacionada con la genealogía.

Desde pequeña, había escuchado contar a mi abuela una leyenda relacionada con un cortijo cercano al lugar donde vivíamos; en el campo de Benajarafe. La leyenda hablaba de un moro que cada noche de luna llena volvía, convertido en fantasma, para vigilar desde el cerro más alto todo lo que un día le había pertenecido: su casa, su tierra y su tesoro enterrado.

Los viejos del lugar hablaban del fantasma del moro con tal naturalidad que yo misma soñaba con verle algún día y muchas veces subí al cerro guiada por el afán de conocer al protagonista de lo entonces para mi era como un cuento.

Pronto tuve que abandonar el lugar para enfrentarme a la fría realidad: aprender de memoria la tabla de multiplicar y la lista de los reyes godos.

Pero aquella historia quedó almacenada en mi memoria para siempre; me bastó volver al cabo del tiempo y contemplar con estupor la sustitución del cortijo por una enorme alberca sin agua, para que la chispa de la curiosidad volviera a saltar. Convencida de que toda leyenda encierra una verdad, me propuse averiguar que había de cierto en aquello que contaban los mayores. Fue así como emprendí la búsqueda de artículos, libros o documentos sobre la Historia de Benajarafe y su entorno geográfico.

Luego, en 2013, con la ayuda de mis padres, empecé a indagar en la historia que no se suele escribir con mayúscula, en la que escribieron día a día mis antepasados y sus familiares, vecinos de Benajarafe y aledaños. Y así nació una pasión.

Hoy, Historia y Genealogía se dan la mano en estos pequeños espacios, creados para compartir dos de mis aficiones favoritas.

No soy una experta y desde ya pido disculpas por los errores o inexactitudes que se puedan producir.

Solo tengo la pretensión de que estas historias no queden en el olvido. 

                                                 Obdulia Ramírez García



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